05 de agosto de 2009
Tras el impedimento del oficialismo, el Senado rechazó el tratamiento sobre tablas de la suba en el precio del gas, que ahora pasó para la próxima sesión de la Cámara Alta. La oposición había pedido que se discutiera el aumento en el Recinto.
El presidente de la UCR, Gerardo Morales, fue quien hizo el pedido, respaldado por las otras bancadas opositoras. Para habilitar esa votación, necesitaba el apoyo de al menos dos tercios de los presentes.
Entre los que pidieron que se derogue o modifique sustancialmente el esquema de aumentos de las tarifas de gas estuvieron la Coalición Cívica, el disidente de esa fuerza Manuel Cabanchik; los justicialistas disidentes Adolfo Rodríguez Saá y Juan Carlos Romero.
Los legisladores habían escuchado esta mañana al secretario de Energía de la Nación, Daniel Cameron, y a otros funcionarios del área que defendieron los aumentos de tarifas que están llegando con las facturas de este mes.
Cameron sostuvo que "entre el 95 y el 96 por ciento" de los usuarios a los que les llegó la suba "están en condiciones de pagar por su mayor consumo". Según argumentaron él y los otros funcionarios, el incremento impacta casi exclusivamente en personas de clase alta y media alta.
Mientras tanto, la oposición considera que los incrementos son "desmedidos e injustos" y en algunos casos llegan al 300 por ciento.
Los funcionarios justifican que las subas son porque la Nación está dejando de pagar los subsidios a empresas energéticas.
El presidente de la UCR, Gerardo Morales, fue quien hizo el pedido, respaldado por las otras bancadas opositoras. Para habilitar esa votación, necesitaba el apoyo de al menos dos tercios de los presentes.
Entre los que pidieron que se derogue o modifique sustancialmente el esquema de aumentos de las tarifas de gas estuvieron la Coalición Cívica, el disidente de esa fuerza Manuel Cabanchik; los justicialistas disidentes Adolfo Rodríguez Saá y Juan Carlos Romero.
Los legisladores habían escuchado esta mañana al secretario de Energía de la Nación, Daniel Cameron, y a otros funcionarios del área que defendieron los aumentos de tarifas que están llegando con las facturas de este mes.
Cameron sostuvo que "entre el 95 y el 96 por ciento" de los usuarios a los que les llegó la suba "están en condiciones de pagar por su mayor consumo". Según argumentaron él y los otros funcionarios, el incremento impacta casi exclusivamente en personas de clase alta y media alta.
Mientras tanto, la oposición considera que los incrementos son "desmedidos e injustos" y en algunos casos llegan al 300 por ciento.
Los funcionarios justifican que las subas son porque la Nación está dejando de pagar los subsidios a empresas energéticas.
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